viernes, 5 de agosto de 2011

Y me bastó tan poco para quererte tanto
Y sucedió que poco a poco me fui entregando.
Cómo saber? Cómo entender? 
Lo que sentí cuando te vi.
Supe que no eras para mi.
Pero bastó un segundo, para entrar en tu mundo...

Sin quererte amar, me perdí, y hasta hoy no he podido escapar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario